por Isabela Vieira
Brasil, Francia y la Agencia Panafricana de la Gran Muralla Verde, lanzaron este jueves 21 un edicto para estimular investigaciones de combate a la desertificación en África, precisamente en regiones áridas y semiáridas. El anuncio fue hecho este miércoles 20, en evento paralelo a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible, la Rio+20.
La inversión será de un millón de euros en investigaciones y proyectos, visitas exploratorias a África y a Brasil, además de eventos para transferencia de tecnología. El requisito es que los interesados integren instituciones o sean investigadores de alguno de los tres países, explicó el presidente del Consejo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico de Brasil (CNPQ), Glaucius Oliva.
Según él, instituciones brasileñas como las universidades federales de Bahia, Ceará y Pernambuco, ya desarrollan investigaciones o tienen experiencias en el semiárido brasileño, que se pueden aplicar en África. Entre ellas están la instalación de pozos, el tratamiento de agua salobre, la gestión de producción animal y el aprovechamiento de la vegetación típica.
Oliva añadió que la sinergia quiere ir más allá, incentivando la venida de estudiantes africanos a cursos de maestría y doctorado en diversas áreas. “Las soluciones buscadas para el semiárido no son simplemente de irrigación, de llevar agua a la región seca. Eso pasa por el aprovechamiento de las características económicas de la región y no solo el uso agrícola de la tierra”, explicó.
El edicto está dirigido a países africanos francófonos, movilizados desde 2010 por el Instituto de Investigación para el Desarrollo (IRD). El representante del órgano en Brasil, Jean-Loup Guyot, explica que desde el seminario sobre desertificación organizado por Brasil en 2010, investigadores de instituciones africanas, brasileñas y francesas han demonstrado interés en la
acción conjunta.
“Estamos facilitando este primer momento. Sabemos que el monto es pequeño y que las metas son osadas. Pero es un inicio que queremos fortalecer”, dijo el Sr. Guyot.
Para el presidente del CNPQ, llevando en cuenta las semejanzas culturales entre África y Brasil,las diferencias lingüísticas no deben ser obstáculo. “Es una cuestión de dos o tres meses. Somos
todos hablantes de lenguas latinas. Es necesario un poço de práctica”.
Edición: Graça Adjuto
Traducción: Jaime Valderrama